miércoles, 10 de noviembre de 2010

Actualidad de las farmacias en chile


Lamentablemente, en la actualidad, gran parte de la labor social del químico farmacéutico se ha visto opacada, aplacada y obstruida por el fenómeno de la capitalización de las entidades. En chile, es muy común ver que ya no existen tantos supermercados “OSO”, “El Vecino”, “El Baratillo”, en fin, supermercados de barrio o de pueblo. Estos han sido claramente sustituidos por los supermercados de las grandes cadenas de supermercados, que a lo largo de chile no son más de 3 cadenas de supermercados. En el caso de las farmacias, ha sucedido exactamente el mismo fenómeno, en donde las farmacias de barrio con el QF “amigo”, ha sido reemplazado por una farmacia que representa a una cadena, que en chile son hasta el momento 4 cadenas (pero las más importantes son solo 3).
Esta nueva modalidad o nuevo modelo de farmacias, presenta además un nuevo sistema de administración de farmacias, en donde ya no prima el paciente, sino que se prioriza la venta. Claramente tornando más comercial el rubro de la farmacia. En este modelo, el farmacéutico ya no forma un protagonismo sanitario en la farmacia, sino más bien un protagonismo administrativo, en donde el QF más que un asesor de salud, pasa a ser un mero administrador (con todo el respeto que los administradores propiamente tales merecen), y su protagonismo sanitario se ve claramente disminuido.
La legislación actual de farmacias en chile establece a que obligatoriamente debe haber un químico farmacéutico en la farmacia, y esto es así y se ejecuta. Lo que lamentablemente la legislación no establece, es la función propiamente tal que el químico farmacéutico debe realizar al interior de la farmacia. En esto, las cadenas farmacéuticas aprovechan el rol como jefe del químico farmacéutico, y de delegan funciones netamente administrativas a cumplir por un lado hacia la farmacia, (rindiendo cuentas, balances, cuadraturas de caja, metas de venta mensuales, etc.…), y por otro lado administrativas y de supervisión de personal. Lo cual deja de lado la labor sanitaria que debe cumplir el QF.
¿Pero cómo se llego a eso? En un comienzo claramente existía una mayor cantidad de farmacias tradicionales, en estas el QF claramente ejercía una labor primeramente sanitaria y la labor administrativa iba en segundo plano, dado que no era tan necesario que rindiera cuentas a diario a su jefe. Pero por el lado de las cadenas de farmacias, cuando estas estaban en sus comienzos, tuvieron poca adherencia de farmacéuticos experimentados y establecidos, pero se dieron cuenta que tenían una gran facilidad de captación de farmacéuticos recién egresados, y a estos se les ofrecía una promesa de sueldo fijo mensual y un trabajo más o menos relajado, y libre de las preocupaciones que un negocio propio les iba a conllevar. Los farmacéuticos recién egresados, con poca experiencia claramente vieron una muy buena oportunidad en este ofrecimiento, y no dudaron en aceptar tan buena oferta. De esta manera, las cadenas de farmacias se fueron expandiendo, y las funciones y labores de los farmacéuticos contratados por ella se fue tornando cada vez más administrativa, dado que tenían que cumplir con las exigencias cada vez mayores impuestas por la cadena de farmacias, las cuales en un comienzo eran de administración y rendiciones de cuenta, y hoy en la actualidad, va desde su clara función de administrador contable, y además debe rendir cuentas de las metas logradas o no logradas a fin de mes.
Este ha sido el precio que ha tenido que pagar la labor social del químico farmacéutico, en pos del progreso de chile. La legislación chilena en ese aspecto, verifica que claramente las cadenas farmacéuticas cumplen con las exigencias de la ley al mantener a un químico farmacéutico titulado por farmacia. Lamentablemente lo que la ley no ve es la labor que este químico farmacéutico no está cumpliendo, debido a que debe realizar y cumplir con sus deberes administrativos a la cadena de farmacia, desplazando la labor que debe cumplir el químico farmacéutico como tal, y dejando como absurda la ley que establece la tenencia de un QF por farmacia, la cual se creó en base a la importantísima labor que debe cumplir el QF en materia sanitaria. En esto los legisladores no han analizado la situación, y mucho menos han buscado establecer medidas que obliguen a las farmacias a que hagan que su QF realice sus deberes sanitarios como corresponde.
No tan solo esto ha sido consecuencia de el progreso, sino que además, las cadenas de farmacia han ido ganando un terreno importante en el “mercado farmacéutico”, desplazando a las farmacias tradicionales de lugar, ofreciendo más productos de los que una farmacia tradicional ofrecía, facilidades de pago (no es novedad que las farmacias hoy en día poseen tarjetas de debito para sus clientes), cambiando el modelo tradicional de farmacia por uno donde la farmacia se asemeja cada vez más a un supermercado. Todos estos factores y bastantes otros más, sin considerar que el químico farmacéutico paso de ser un empleado más dentro de la farmacia, han potenciado el hecho de que el QF deje de lado sus labores sanitarias dentro de la farmacia para darle paso a las exigencias administrativas que le acarrea su puesto dentro de una farmacia.
De esta manera, los pacientes que acuden a las farmacias comienzan a recibir de manera cada vez más fuerte una percepción de farmacia cada vez más comercial, en donde existe un QF con un claro protagonismo social y sanitario disminuido, y los pacientes comienzan a cambiar en su mayoría la visión del medicamento, de una herramienta para tratar problemas, afecciones y enfermedades, a un mero bien de consumo, restándole la importancia, consideración, y respeto que el medicamento merece, dado que dígase lo que se diga, o piénsese lo que se piense, el medicamento como tal es una sustancia química ajena al organismo, y que va de una u otra manera a alterar el funcionamiento del mismo en una proporción menor o mayor dependiendo del fármaco y la aplicación que se le dé. Y teniendo ese solo concepto en mente, se puede entrever claramente que esa alteración puede ser menor o mayor, beneficiosa o perjudicial, dependiendo del uso que se le dé al medicamento. Y habiendo un mal uso (como puede ser tomándolo en dosis que no son adecuadas) o un uso irracional del medicamento (la cual involucra un mal uso, y además considera las aplicaciones inapropiadas terapéuticamente hablando, como utilizar un medicamento que sirve para tratar inflamaciones, como un medicamento para tratar los hongos de los pies por ejemplo), no tan solo no se logrará el efecto terapéutico o el alivio deseado, si no que por un lado se puede agravar el problema original, por otro lado se puede ocultar el problema original (ocurre por ejemplo en algunos casos cuando se utilizan antifúngicos para tratar problemas genitales, algunas asociaciones de estos pueden enmascarar en algunos casos las molestias causadas por enfermedades venéreas, haciendo que la enfermedad se desarrolle con mayor facilidad), o también puede ser que se generen nuevos problemas asociados al medicamento (un ejemplo típico de esto lo sufren las personas con cefaleas crónicas, o sea que sufren de constantes dolores de cabeza, tienden a consumir muy a menudo medicamentos antijaquecosos, como el cefalmin, estos productos en exceso pueden generar una intoxicación sistémica asociada con dependencia, que finalmente va a generar nuevos cuadros de dolores de cabeza crónico que van a producir un circulo vicioso de dolores de cabeza e ingesta de el medicamento. Lo cual se soluciona suspendiendo por un tiempo prolongado superior a dos meses la ingesta del medicamento en cuestión, lo cual de manera muy dramática soluciona tanto los problemas de las cefaleas, como también los malestares asociados a la intoxicación inducida por este medicamento).
Como se ha podido ejemplificar hasta el momento, la falta de un farmacéutico activo en la atención al paciente, ha generado problemas asociados a los medicamentos debido al mal uso de estos mismos por parte de los pacientes. Este hecho tiene soluciones muy claras y taxativas, que requieren de la formulación, reformación y derogación de algunos artículos de ley, pero de esta misma manera si se hiciera esto, las entidades más afectadas claramente seria el bolsillo de las grandes cadenas farmacéuticas, las cuales en estos momentos no tan solo tienen acaparado el mercado farmacéutico con un 92% de representatividad en el mercado chileno, sino que además, tienen una clara influencia económica, y esto mismo ha generado que reformar leyes que vayan en perjuicio de estas farmacias no sería algo favorable para la mayor parte de este mercado compuesto por una cantidad muy mínima de actores.

Otro factor que ha favorecido mucho el desarrollo de las grandes cadenas farmacéuticas, viene desde el periodo del gobierno militar. En 1975 se deroga la conocida como “ley del circuito”, la cual en ese entonces establecía que una farmacia no podía estar cerca de otra farmacia en un radio de 400 metros. Claramente esta ley tenía sus pros y sus contras, pero sanitariamente hablando tenía muchos más argumentos a favor que en contra, y siendo frío en el pensamiento, si se habla en un contexto más bien económico, un modelo así también presenta una cantidad importante de argumentos a favor de este modelo de legislación como por ejemplo “la colusión” que esta tan en la boca del ministro de economía. Además de la falta de fiscalización tanto de las exigencias que debe tener una farmacia como tal, tanto sanitarias como económicas-administrativas-comerciales, así como una falta en la legislación que garantice el rol que debe cumplir un QF al interior de una farmacia, y que lo libere un poco más de la labor administrativa que tiene a su cargo hoy en día.

5 comentarios:

  1. Como me suscribo a este blog?

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    1. Si tienes una cuenta en gmail no deberías tener problemas para poder suscribirte. también tengo una pagina en facebook de la unión farmacéutica chilena.

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    1. Si tienes una cuenta en gmail no deberías tener problemas para poder suscribirte. también tengo una pagina en facebook de la unión farmacéutica chilena.

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  3. Es claro el horizonte que se aproxima, pero no hay que satanizar las cadenas siempre, traen mejoras de calidad y obligan a otros a actualizarse, aunque siempre hay que tomar los recaudos necesarios en todos los aspectos, por cierto muy bueno el blog y la organización, saludos desde Asuncion.

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